Ubicada en el estado de Goiás, se puede considerar Caldas Novas como un lugar único, con una belleza deslumbrante y aguas calientes por toda parte. La ciudad encanta por sus hoteles, parques temáticos y resorts con sus aguas naturalmente calientes.

La ciudad dispone del más grande parque hotelero de la región Centro-Oeste y muchos hoteles tienen sus propios parques acuáticos, pero la región también cuenta con estancias termales abiertas al público. Una curiosidad es que sus aguas calientes tienen origen en las lluvias que, cuando son absueltas entre las hendas de las rocas, alcanzan profundidades superiores a mil metros. Después de calentar, las aguas vuelven a la superficie por medio de un sistema de fracturas (hendidura en las rocas).

El Lago Corumbá, el que abastece la usina hidroeléctrica de Corumbá I, es otro atractivo interesante en la región. En medio a sus 65 km², se puede hacer paseos en lanchas, botes y jet ski a lo largo de la orilla, disfrutando de cascadas y bares. La pesca deportiva también es un atractivo en el lago, incluso se suelen llevar a cabo competiciones.

El Parque Estadual da Serra de Caldas Novas ofrece dos senderos (Cascatinha y Paredão) que dan acceso a cascadas y miradores de donde podrás apreciar las bellezas de la fauna y la flora del Cerrado (el bioma local, como una sábana), a 1.043m de altitud. Los guías deben acompañar durante los senderos, los que duran entre 1h30 y 2h30.

Aprovecha la visita para degustar las iguarias goianas (del estado de Goiás), como el pescado a la plancha, un plato típico muy famoso. El pescado sin escamas lleva muchos condimentos, se lleva al horno de barro y asa en una teja. El pequi es una fruta típica del Cerrado y muy utilizado en la gastronomía local.

Visita también el Rio Quente, a 30 km de Caldas Novas. Ahí encuentras el más grande río de aguas calientes del planeta, con 12 km de extensión, además de uno de los más grandes parques acuáticos de Brasil.